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Langostinos al curry rojo

Mañana me toca acompañar a mi hija al destino donde seguirá estudiando y formándose para, como decía mi abuela, hacerse gente. A lo largo de mi vida he escuchado todo tipo de testimonios de amigas y amigos que pasaron antes por lo mismo y más o menos te haces a la idea, pero cuando le toca a uno…… ufffff ¡harto difícil! Continuar leyendo «Langostinos al curry rojo»

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Pollo al curry con quinoa

La quinoa aterrizó en mi vida no hace mucho tiempo.  Confieso que cuando la compré por primera vez no lo hice convencida y mi imaginación no la llevaba más allá de alguna ensalada pero es que se ha popularizado tanto que me voy quitando los límites y cada vez la utilizo más y  la proporción va en paralelo porque cada vez me gusta más.

Esta receta que dejo hoy por aquí es de las básicas, de las de principiantes y de las de imposible que no nos salgan a la primera. Además cuando la prueben verán que explotan de repente en nuestra boca el exotismo del curry y la leche de coco y la deliciosa suavidad del pollo. Así,  a la vez.

La quinoa no aporta un gran sabor pero si que aporta un montón de cosas y todas buenas para nuestros cuerpitos.

Al tratarse de un pseudocereal (realmente es una semilla) tiene un gran contenido en fibra, así que regula más que los bífidus y nos previene de enfermedades que pudieran afectar a nuestro colon. Contiene Omega 6 y Omega 3, que nos ayuda a mantener el colesterol en sus índices y así no se nos llena de asteriscos la próxima analítica. Con ello también ayudamos a prevenir las enfermedades cardiovasculares que tanto miedito dan. Su alto nivel en proteína vegetal, lo convierten en el aliado perfecto para los kilitos de más, la quinoa la podemos cenar si sensación de culpa y por esta vez, mi amigo Sergio está de enhorabuena porque no contiene gluten, así que por todo esto y seguro que por más cosas, no importa que no aporte tanto sabor, si que aporta textura y auténticos tesoros para nuestro organismo.

Además es versátil y no se hacen una idea de cuánto. Esta es la primera pero verán que pronto aparecerá hasta convertirse en un viejo amigo y frecuente compañero de mesa y mantel.

INGREDIENTES ( para dos personas)

250 grs de pechuga de Pollo

125 grs de Quinoa

1 Cebolla

1 cucharada tamaño sopera de Curry en polvo

600 ml de caldo de pollo (puede ser de Tetra Brick)

300 ml de leche de coco

Sal y pimienta

MODO DE HACERLO

Antes que nada, pondremos la quinoa en remojo porque es imprescindible lavarla bien antes de usarla. Yo primero la dejo en remojo unos 10 minutos, le quito el agua y la dejo debajo del chorro un buen rato y la remuevo bien para que suelte todas las impurezas.

Una vez lavada, reservamos hasta el momento de utilizarla.

Ahora picaremos muy menuda la cebolla y la saltearemos hasta que coja un color doradito. Importante no poner un exceso de aceite, lo justo para saltear la cebolla.

Una vez tengamos la cebolla dorada, cortaremos la pechuga de pollo en trocitos algo toscos pero no muy grandes y los incorporaremos a la cebolla. Saltearemos a fuego vivo, removiendo para que no se nos pegue.

Una vez el pollo esté ligeramente dorado, incorporaremos la quinoa y removeremos bien. Cuando esté bien mezclado, automáticamente verteremos el caldo de pollo y seguidamente la cucharada de curry

Removemos bien y dejamos que todo cueza durante 18 minutos a fuego medio-alto y removiendo de vez en cuando. La idea es que el caldo vaya desapareciendo a medida que avance el tiempo (como cuando cocinamos un arroz) Si viéramos que el caldo desaparece y aún queda tiempo para finalizar la cocción, podremos ir vertiendo caldo poco a poco, lo necesario para que no se seque antes de tiempo.

Una vez pasados los 18 minutos y con el pollo y quinoa húmedos pero sin exceso de caldo, bajaremos el fuego a medio – bajo  e incorporaremos la leche de coco y con esa potencia de calor, mantendremos al fuego durante 5 minutos más.

Rectificaremos de sal, añadiremos al gusto pimienta negra y a disfrutar de este platito, sencillo, delicioso, exótico y sanito.