Cada vez que he hecho esta empanada surte el mismo efecto. Llego a la mesa, la coloco y enseguida me asaltan con las preguntas por el relleno. Algunos hasta dan por hecho que es una empanada de atún y cogen pedazo y a la boca y en ese momento y con la boca llena me preguntan -¿sardinas? y yo, orgullosa, respondo afirmativamente. El resto de comensales se extraña y algunos hasta dejan el recorrido de su mano a medio camino y no se animan a probarlo pero eso solo dura unos instantes, hasta que quien la ha probado empieza con esos sonidos tan comunes que nos salen de manera irrefrenable cuando lo que probamos está realmente bueno. Uuuuummmmm.
Cierto es que si prefieren rellenarla de lo más común, háganla de atún. Si quieren darle potencia sin perder el sabor tradicional, prueben a hacerla con bonito en escabeche y si ya quieren pasarse de sofisticados, rellenen de berberechos. Se acordarán de esta receta igualmente. Y soy así de rotunda porque a mi me pasó, la receta me la dio la suegra de mi hermana y gallega ella para más señas. Cierto es que ella es muy auténtica y hasta elabora la masa. Yo la he hecho alguna vez pero no en este caso no hice la masa, ya se las daré en alguna otra ocasión, cuando vuelva a tener la suerte de pasar un ratito con Victoria porque la tengo algo lejos, de charlar de nuestras cosas, de intercambiarnos recetas pero sobre todo de achularla porque ella es de esas personas a las que se les espera siempre con muchas ganas.
INGREDIENTES:
- 2 Cebollas
- 6 Pimientos del Piquillo asados
- 4 cucharas soperas de salsa de tomate casera
- Masa para empanadas (ahora verán la foto, no uso hojaldre)
- 2 latas de Sardinas en aceite de oliva
- Aceite de oliva
- 1 Huevo
MODO DE HACERLA:
El principal truco de esta receta radica en la cantidad de cebolla y en el punto que le daremos, así que lo primero que haremos será cortar la cebolla en juliana y ponerla en un caldero chato sobre el fondo con aceite de oliva que previamente calentaremos.
Pocharemos muy bien la cebolla hasta que quede prácticamente transparente. Yo, para que no se me queme, la tengo un buen rato a fuego medio, nunca fuerte. Cuando empiece a pochar, incorporaremos los pimientos del piquillo asado y removemos bien para ir mezclando todo.
Justo después incorporaremos la salsa de tomate y volveremos a remover.
Cuando tengamos todo bien mezclado incorporaremos los lomos de sardinas (escurridos del aceite que traen en la lata). Yo parto los lomos por la mitad pero inevitablemente al mezclarlos con el resto de la fritura, se irán deshaciendo.
Mantenemos todo a fuego bajo y reservamos.
Ahora empezaremos con la masa. Yo utilizo la masa para empanadas que hoy por hoy la encuentras en prácticamente cualquier supermercado. En este caso vienen dos planchas rectangulares enrolladas. Las desenrollaremos y la colocaremos sobre una superficie plana, limpia y seca y manteniendo debajo el papel vegetal en el que viene enrollada.
Esta es una masa ya preparada para empanadas, así que no les ocurra estirarla, ni pincharla, ni manipularla porque se les rompería.
Ahora cogeremos el relleno y lo pasaremos previamente por un escurridor para quitarle un posible exceso de líquido. Y ya podremos empezar a rellenar la empanada.
Al rellenarla, tengan en cuentan dejar los bordes libres, para colocar más cómodamente la masa que cierra por arriba y evitar que el relleno se nos desparrame.
Una vez colocado todo el relleno, desenrollaremos la segunda masa (en este caso si prescindiremos del papel en el que viene) y con cuidado la colocaremos justo encima de la masa que ya tiene el relleno.
Presionaremos con suavidad sobre los bordes y ayudándonos con los pulgares y para que de efecto visual quede más estética, iremos haciendo rollitos en los bordes hasta llegar al tope donde empieza el relleno.
Ahora, para evitar que la masa se infle en el horno, con un vaso pequeño, colocado boja abajo, lo pondremos justo en el centro de la empanada y haremos un ligera presión que justamente rompa la primera capa. Se hace con mimo.
Para terminar, batiremos 1 huevo y pintaremos toda la superficie de la masa y los bordes. Que quede bien pintada porque gracias a eso, nuestra empanada se tostará mejor, quedará más brillante y más apetecible.
Y ya solo queda precalentar el horno a 200º, calor arriba y abajo y si nuestro horno tiene función aire o ventilador, también la activaremos. Una vez caliente, metemos la empanada y calculamos 12 minutos. En las instrucciones viene más tiempo de cocción pero en mi caso y en mi horno, el tiempo que yo he calculado son 12 minutos. Les recomiendo que a partir del minuto 10 la vayan mirando.
Cuando la saquemos del horno, la dejaremos que se atempere. No intenten cortarla muy en caliente porque se rompería y se saldría todo el relleno. Mejor cortarla cuando esté tibia.
Y ya mi última recomendación, un pedazo generoso de empanada, una caña bien fresquita y una compañía interesante y ya tienes el día resuelto.
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