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El coño de Ana Oramas

 

Ana Oramas en Cope.
Ana Oramas en Cope.

 

Ana Oramas tiene un coño independiente que se pasea por el Congreso o por las calles de Santa Cruz. Su coño (patrimonio inmaterial de la humanidad con permiso de mi Culiao) es un ente independiente que va más allá de los dictámenes partitocráticos. Sólo se me ocurre felicitar y aplaudir su poderío coñil. Sus ovarios, por otro lado, son asteroides que luchan contra el sanchismo– sometimes-, o se declaran nacionalistas canarios a favor de la nación española. En los sistemas democráticos deben existir figuras independientes, Ana lo fue mientras duró su discurso. Rompió con la esclavitud de partido– mal llamada disciplina de partido-, y apostó por su propio criterio. Oramas no es una persona formada en teoría política. Es lista, pero no inteligente. Lo importante es que es graciosa y defiende- a su manera- la nación española. Carlos Sosa le dedicó « ¿Y a ti qué te importa la unidad de España?». La unidad de España es cosa de todos y de todas (lenguaje progre), e incluso de aquellos que no quieran formar parte de España. He leído su artículo, Carlos. Es graciosillo, es interesante el análisis que hace de Coalición Canaria aunque con algún agujero que otro. Todos tenemos agujeros, no se preocupe. Algunos cerrados y otros abiertos. La democracia necesita agujeros abiertos de mente, para que seamos libres. No sé si lo hiciste con capciosidad, Ana, pero «óle tú por haberlo hecho».

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Se divisa tierra firme, 2020

 

El loco, ese soy yo. Ese que no tiene nombre, como dice la copla. Lo mismo me llaman Adriano, Arthur o Ramón. ¡Qué importa! Adiós a los mil demonios que han manejado mi alma. Adiós a las ratas y a las palomas. Quien quiera volar, ¡qué vuele! Yo sigo mi camino con templanza y alegría. Viviendo en libertad. Vivo y dejo vivir. Espero que el año 20 sea mejor que el anterior. El anterior ha sido maravilloso, pero cualquier tiempo pasado fue peor. Viva este presente de amigos y familiares, que no invadan mi soledad sonora. Gracias al pasado, pero yo me quedo en mi ruta hacia un futuro feliz donde la libertad y el amor inundan mi corazón. Mi amor para los sirios del mundo, qué pena que Siria sea la puta (una puta que fue rey de reyes) en manos de unos mafiosos) ¡Paz y dignidad para Siria! Mi amor más honesto (el único que puedo dar) para cualquier ser humano de la tierra. Me agarro a la belleza, a Antarah ibn Shaddad y a los sapientísimos versos de Yehudah ha-Levi: «Dichoso el que aguarda y logre ascensión de tu luz y despunten sobre él tus auroras».

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Soy gitano

 

 

Manuel Molina, un gran hombre.
Manuel Molina, un gran hombre.

 

Existe una novela de Cervantes titulada «La Gitanilla», donde afirma lo siguiente: “Parece que los gitanos y gitanas solamente nacieron en el mundo para ser ladrones: nacen de padres ladrones, críanse con ladrones (…)” A Cervantes solo le puedo responder con: “Yo soy gitano”. Puede que en otra vida haya sido gitano o no, pero siento pasión por la cultura, el arte, el duende, el temperamento y por supuesto la libertad del pueblo gitano. El pueblo gitano es digno de admirar (¡qué orgullo ser y/o sentirse gitano!). Un grupo de seres humanos venidos de la otra punta del mundo- Rajastán, India- hace miles de años; recorriendo en caravanas medio mundo hasta llegar a su Ítaca, es digno de admirar. ¡Viva los gitanos! Me siento tan gitano, moral y literariamente, que estoy preparando un ensayo sobre los gitanos. En muy breve publicaré mi primer libro, y a partir de ahí vendrá el de los gitanos y otros muchos (¡si Undebel quiere!). Viva los gitanos, ejemplo de identidad que ha sobrevivido a pesar de los criminales y los tiranos que han querido desacreditar a todo un pueblo-pero no lo han conseguido-. Viva los gitanos más allá de la imagen capitalista y superficial que han dado los « Los Gipsy Kings» en la televisión. Los gitanos son rabia, fuerza, historia, misticismo (¡mucho y muy poco conocido!) y admiración. ¡Os quiero, amigos! Un abrazo a todos los gitanos del mundo de vuestro primo Sikabi Cohen.