Publicado el

Hermanos

No hay más Dios omnipotente, omnisciente, omnibello, omniamoroso como la mirada de prado holandés de mi amor, el amor sumiso con el que inclino mi cabeza al suelo cinco veces cada uno de los siete días. Inclino la cabeza. Dios se presenta en la escena, pero la conciencia vuela a otro amor. Hacia el demonio. Quizás, porque Dios y el demonio son la misma cosa pero con distinta energía. Nos han contado la historia al revés. Dios es hermano de Satán y Satán es hermano de Dios. Lo supe cuando vi en la puerta del infierno (entre el apartamento de Rimbaud y el de Reinaldo Arenas) a Satán abrazar, con una fuerza sincera, a Dios.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *



El contenido de los comentarios a los blogs también es responsabilidad de la persona que los envía. Por todo ello, no podemos garantizar de ninguna manera la exactitud o verosimilitud de los mensajes enviados.

En los comentarios a los blogs no se permite el envío de mensajes de contenido sexista, racista, o que impliquen cualquier otro tipo de discriminación. Tampoco se permitirán mensajes difamatorios, ofensivos, ya sea en palabra o forma, que afecten a la vida privada de otras personas, que supongan amenazas, o cuyos contenidos impliquen la violación de cualquier ley española. Esto incluye los mensajes con contenidos protegidos por derechos de autor, a no ser que la persona que envía el mensaje sea la propietaria de dichos derechos.