España o el gran teatro del mundo
Escribe don Jacinto Benavente en el prólogo de Los Intereses creados: «He aquí el tinglado de la antigua farsa, la que alivió en posadas aldeanas el cansancio de los trajinantes, la que embobó en las plazas de humildes lugares a los simples villanos, la que juntó en ciudades populosas a los más variados concursos…
…Y he aquí cómo estos viejos polichinelas pretenden hoy divertiros con sus niñerías”.