Publicado el

¿Existe el mal?

Un buen hombre que conocí hace años me dijo una vez: «Cada día me levanto con el propósito de llegar a la noche sin haber hecho daño a nadie». Por muy buena fe que hayamos puesto, alguien ha salido perjudicado por algo que hemos hecho, e incluso por algo que dejamos de hacer. Eso no es maldad, es la vida, porque nunca llueve a gusto de todos. Y pasar un día en que nadie sufriera el menor daño por su causa era para aquel hombre su día perfecto. imagenyinyan.JPGPor el contrario, me temo que también existen personas que cada día se levantan con el propósito (al menos inconsciente) de fastidiar a quien sea, el caso es que se note que están ahí, aunque sea de forma negativa. Sobre el mal, el bien, la bondad y la maldad hay docenas de teorías, ensayos y hasta corrientes filosóficas y religiones. El problema es que los significados de dichas palabras no son del todo universales, aunque hay unos conceptos básicos que generalmente tienen que ver con la supervivencia de la especie, tan básicos son. Es difícil entender que haya alguien, no que pueda hacer daño alguna vez incluso voluntariamente, sino que sea intrínsecamente malo, que anide en él la maldad, el deseo de dañar a los demás a todas horas. Hay psicólogos que defiende que sí, que puede haber personas así, que buscan sistemáticamente dañar, sin que padezcan ninguna enfermedad psiquiátrica, que son malvados porque sí; por el contrario, hay otros que aseguran que todo es fruto de las circunstancias y de la vida vivida por cada cual, y que cualquier persona digamos «normal» puede convertirse en un sádico en determinadas condiciones. No sé qué pensar, pero cuando veo que hay seres que traspasan hasta los slímites de la supervivencia de la especie, y su maldad los lleva hasta el punto de disponer de la existencia de los otros, estoy por creer que hay personas que sí, que son intrínsecamente malvadas. Es que si no es así no se entiende que estemos rodeados de tanto impulso destructivo.

Publicado el

No sé yo si fue buena idea

la foto comiccs22.JPGRelata el libro del Génesis, primero del Pentateuco y de La Biblia:
1, 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.
2, 7 Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.
2, 21 Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar.
2, 22 Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre.

***

Con todo respeto, Jehová Dios, aparte de la contradicción evidente
entre el primer versículo y los otros tres, y de las barbaridades que se
cometen aludiéndole en sus distintos nombres, ¿le sigue pareciendo
una buena idea haber creado al género humano?
Publicado el

La vida y la muerte

Me quedo perplejo cuando veo la ligereza con que algunos comentaristas aquí y allá se toman el asunto del preso belga Frank Van Den Bleeken, que lleva 30 años de reclusión por violaciones y un asesinato. Basándose en una ley del 2002 que permite la eutanasia voluntaria en casos de dolor físico y psíquico insoportable, los tribunales decidieron autorizar la muerte asistida del recluso el 11 de enero. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha fallado en contra de la decisión del tribunal belga, y cuando parecía que finalmente la muerte del preso tendría lugar el domingo, los médicos han decidido cambiarlo a un centro más especializado en el que pueda tratarse su estado. zzzzz belga preso.JPGParece una forma política de no saltarse las leyes europeas y al mismo tiempo mantener las belgas, aunque ello no ha podido impedir que siga el debate sobre si se trata de una muerte por eutanasia o se parece más a una ejecución. Ante situaciones como esta, se supone que los razonamientos públicos debieran estar muy respaldados por argumentos médicos, psiquiátricos, jurídicos, sociales y éticos, de manera que me parece muy temerario que se lancen al ruedo a teorizar personas que en general apenas si tienen un barniz en esas disciplinas tan rigurosas que mencionaba. La situación es muy nueva, porque no es una enfermedad física, y por otra parte se habla del derecho de cada persona a una muerte digna. La cuestión es si esta manera de morir lo es. Yo no lo sé, y también pudiera suceder que a determinados enfermos mentales no diagnosticados se les ocurriera pedir la eutanasia porque en realidad desean (o creen desear) morir pero no se atreven a suicidarse. He seguido este caso y, a pesar de haber leído toda la información publicada que he encontrado, no consigo formarme una opinión. Paralelamente, se arma el debate sobre si las prisiones belgas no están dotadas con medios para atender a este tipo de reclusos, y me pregunto si hay países donde sí lo están; otros pensarán que un criminal no tiene derecho a ser tratado de manera tan especializada, pero todo esto no nos aleja del núcleo del asunto, que es si un ser humano tiene derecho a pedir su muerte y si un estado tiene o no la obligación de facilitársela. ¿Es el debate de la pena de muerte al revés? ¿Pueden los médicos revocar una decisión de un tribunal? Solo tengo preguntas, y por ello me asombra que haya personas que despachan un asunto así con la levedad de un cotilleo.