Con el petróleo a precios inimaginables hace tan sólo unos meses, Canarias se enfrenta a uno de sus problemas fundamentales: la energía. Se hacen tímidos avances en las energías renovables pero es muy poco, y esa dependencia externa nos debilita. Nuestra situación roza el absurdo.
Es una potencia múltiple el mar, pues se puede conseguir energía de las mareas, del oleaje y de los cambios de temperatura. El viento puede mover generadores, sobre todo si es un viento constante y no excesivo que pueda crear problemas. El sol es el principio de la vida, nada puede funcionar sin él, y su energía puede capturarse para ser utilizada en el momento o para almacenarla.
En Canarias no tenemos saltos de agua (casi no tenemos agua), y la mayor parte de la que usamos proviene indirectamente de ese petróleo que nos arruina el bolsillo y que al quemarse destruye el planeta. En cambio tenemos vientos constante y moderados como son los alisios, sol a mansalva y mar, pero no un mar cualquiera, un mar… mejor que hable Tomás Morales:
Atlántico infinito, tú que mi canto ordenas!
Cada vez que mis pasos me llevan a tu parte,
siento que nueva sangre palpita por mis venas
y a la vez que mi cuerpo, cobra salud mi arte.
Pues eso.
Le felicito por su blog, echaba en falta sus artículos pequeños pero como aguijones. Aquí nadie se preocupa del mañana, y los políticos sólo quieren sus mamanzas y sus guerras por el poder. Con esta gente, nos vamos a morir de sed y de hambre con el petróleo a 200 dólares. Y los empresarios conchavados con ellos para ganar dinero. Yo creo que a esta gente energías renovables les suena a gofio más o menos, no tienen ni idea.
En Canarias padecemos una total dependencia del petróleo y otros combustíbles fósiles, precisamos el oro negro para el transporte, nada se mueve aquí sin su concurso, agua potabilizada y electricidad son también obtenidas a base del mismo tipo de recurso energético. El precio de esa materia prima que nos vemos obligados a importar,experimenta una gráfica de incremento que puede producir mareos y pesadíllas, es una substancia altamente contaminante y además no va a durar mucho tiempo.
Ante este panorama no se observan reacciones acordes a la gravedad del mismo por parte de entes públicos ni privados. Creo que jugamos con fuego, un súbito desabastecimiento de petróleo por cualquier circunstancia, paralizaría al Archipiélago y eso no es ciencia ficción. Así mismo, la tibieza y lentitud en desarrollar y fomentar sistemas para explotar la interminable fuente de energía que el Sol y Eolo nos regalan provoca sorpresa e incluso suspicacias sobre oscuros intereses, pues se sabe que las demandas de fluido eléctrico de algunas de nuestras islas pueden ser cubiertas mediante aerogeneradores y células fotovoltaicas.
Canarias ha estado sometida a la esclavitud de los monocultivos; caña de azucar, plátanos, tomates y por último el turismo el mas volatil de todos. Tal parece que en lo concerniente a la obtención de energía seguimos la misma peligrosa costumbre : dependencia de un solo producto.