Las medidas del Gobierno
Las medidas del Gobierno parecen buenas, pero yo me pregunto qué efecto tienen en las personas que no vayan a comprar un piso en dos años, en las que tampoco vayan a cambiar de coche y en las que no sean accionistas de los grandes bancos. La oposición -o las oposiciones, para ser más exactos- tampoco ha llegado muy lejos, dice esto no, pero no aporta nada.
Ayer me embargaba un sentimiento, mezcla de rabia y tristeza al ver cómo han convertido el Parlamento en una casa de apuestas, a ver quien la tiene más larga. Se les llena la boca diciendo que es el crisol de la soberanía popular y en realidad es un mercado persa; mejor dicho, un mercadillo de baratijas que se compran y se venden al mejor postor.
Cada cual va a mantener lo suyo, y nadie piensa en el interés general, y si lo piensa alguien lo disimula muy bien, porque en el Congreso se habla de todo menos de lo importante, que es unir esfuerzos para salir de la crisis. Es vergonzoso, además, cómo nadie reclama medidas de verdad contra los abusos de los EREs, de la banca, de las muchas corrupciones que existen, que son vox populi y nadie hace nada, y de cómo se aprovechan algunas empresas para quitarse personal de encima. Después se quejarán de que la gente no vaya a votar a la europeas. Sinceramente, ayer me dio vergüenza, no de este ni de aquel, DE TODOS.