Publicado el

7 de julio, San Fermín ma non troppo

Aparte de fiestas tradicionales en otras épocas del año, como el Carnaval, las Fallas, el Rocío o la Feria de Abril, el mayor peso festero recae siempre en el verano, que en Canarias se abre con las hogueras de San Antonio y San Juan y se cierra con el fuego «infernal» de San Miguel el 29 de septiembre, ya en el lindero del otoño. Y es lógico que se aproveche el buen tiempo para armar fiestas que vienen de muy lejos, casi siempre celebrando a un santo o a una virgen, aunque también se han recuperado o creado otras que tienen que ver con las cosechas, el agua, el barro o cualquier otro elemento que finalmente es un factor económico de determinado colectivo (aunque lo de la Tomatina de Albuñol nunca me gustó, debe ser por aquello de que con las cosas de comer no se juega).
zzzzkPICT0018333.JPGY está bien la fiesta como compensación al trabajo, como forma de relacionarse con los demás y como sana diversión. Lo hermoso ha sido siempre que cada una tenga sus propias características, que mantenga el sello que la hace diferente y especial. Pero en los últimos años se está imponiendo una forma grosera de festejar, y así se va perdiendo la esencia de cada una. Cada día, cualquier fiesta, se parece más a todas, y calculas que estás en carnavales porque te quedan restos de purpurina en la cara o en los Sanfermines porque amaneces con un pañuelo rojo al cuello. Otros elementos que están distorsionando el verdadero espíritu de cada fiesta son la violencia y el «todo vale», y estamos viendo en estos días cómo en Pamplona se está convirtiendo en un deporte manosear a las mujeres en contra de su voluntad. Y eso nada tiene que ver con los Sanfermines, con los carnavales o con la romería de San Agapito. Así que, fiesta sí, pero fiesta y no otra cosa, y cada una con sus señas de identidad, porque si no acabarán todas siendo un gigantesco botellón
.

Publicado el

Dilo tú primero, coronel, dilo tú primero

Últimamente hay que andarse con cuidado, porque cada cual tiene su propia idea de la actualidad política y se va haciendo norma que por lo visto hay que compartirla sí o sí. Y empieza a pasarnos como al campesino mexicano, cogido en medio de la revolución. Sirva de reflejo de lo que ya está pasando a diestro y siniestro (literalmente):
zzzzzmexiccc.JPGEl campesino viajaba de Durango a Mazatlán y se cruzó con unos jinetes que le preguntaron:
-¿De quién sos tú, manito?
-De Zapata, ¡Viva la revolución!
Y le dieron dos puñetazos..
Siguió caminando y se cruzó con otros jinetes que le preguntaron:
-¿Y tú de quién sos, manito?
-De Pancho Villa, ¡Viva la revolución!
Y le dieron tres patadas en la espinilla.
Siguió caminando y se cruzó con unos tipos que venían en un coche americano que le preguntaron:
-¿Te han pegado porque eres de Victoriano Huerta?
-No, les dije que era de De Carranza.
-¿Y eres de Carranza?
-Sí. ¡Viva la revolución!
Y ya estos le dieron una paliza por unanimidad.
Maltrecho, el campesino por fin llegó a Mazatlán, y se le echó encima un coronel revolucionario con dos pistolones a las caderas, que le apuntaba con un rifle.
-¿Andas herido manito? ¿De quién sos? -le preguntó.
Y el campesino, después de mirarlo varias veces, contestó:
Dilo tú primero, coronel, dilo tú primero.

Publicado el

El guion de un cómic malo

zzz201405r02_125.JPGAndan por ahí con la matraca de que lo ocurrido en España en el último mes responde a «órdenes superiores» de los poderes ocultos supranacionales y la madre que los parió. Cambio de guardia: se va el rey, se va Rubalcaba, desaparece De Guindos, Rajoy no habla, se adelanta en el PSOE el tapado, se quita de enmedio Durán i Lleida, echan a Pedro J. Ramírez y cambian al director de El País, al de TVE… Y me pregunto: ¿la selección española de fútbol hizo el ridículo también por órdenes superiores? Es que, puestos a cambiar, supongo que el poder supremo de la galaxia habrá ordenado el relevo de Del Bosque, Casillas, Villa, Xavi… Porque una cosa es perder, como Italia o Rusia, y otra inmolarse, y es que lo de España parecía un hara-kiri. Pero no he oído que cambie ningún banquero o jefe de las grandes empresas energéticas, constructoras, de transportes, comerciales o de telecomunicaciones. Debe ser que los dioses no han pedido esos sacrificios… O que los dioses que detentan el poder superior sean ellos. Tocaría entonces hablar de la casualidad, la causalidad o el efecto mariposa, pero en realidad parece el guion de un cómic. De un cómic malo.