En mi país, qué tristeza
puede con mil valientes…»
(Alfredo Zitarrosa).
Cada vez que escucho la canción Adagio a mi país, del cantautor uruguayo Alfredo Zitarrosa, tengo la sensación de que la escribió pensando en Canarias. Pero no, su canción habla de la República Oriental del Uruguay, que aunque su extensión es 23 veces la de Canarias, tiene solo poco más de tres millones de habitantes. Tiene en común con nuestras islas que es una sociedad pequeña, fundada por 16 familias canarias y que se ha construido con una sucesión de inmigraciones que se han mestizado sobre el esquilmado sustrato aborigen. Por lo tanto, su proceso es paralelo al nuestro, con colonización comercial británica incluida, y la independencia no cambió la estructura, solo que el lugar de un enviado de la corona española fue ocupado por un criollo con pedigrí. Siguieron mandando los mismos, los dueños mantuvieron sus prebendas y dominios, a los pobres los mantuvieron a raya y la política es sucedáneo de lrivalidad entre ricos, aunque de vez en cuando se les escapa un espontáneo que hace algunos cambios, que son corregidos inmediatamente para que, como en El gatopardo, todo siga igual. Continuar leyendo «En mi país, qué tristeza»