Publicado el

Pensar migrañas panameñas

Como es fin de semana, me ha dado por pensar bajito, pero resulta que pensar es como el comer y el rascar, empiezas y sin darte cuenta surgen preguntas. Y es que pensar tal vez es eso, generar preguntas, porque nunca hay respuestas definitivas. Ni siquiera podemos estar seguros de lo que se entiende como certezas absolutas, hijas de la ciencia, porque luego viene un nuevo hallazgo, incluso con su ecuación, que desdice lo anterior y se planta como definitivo… hasta que aparezca otro Isaac Newton, otra Marie Curie u otro Stephen Hawking. Y esta generación de preguntas me ha llevado a lo de las sociedades creadas en paraísos fiscales, que Panamá es solo uno de los centenares que existen. Pongo por delante que aquí hay tres cosas que rechazo y condeno: la insolidaridad al restar recursos al propio país, la hipocresía de tratar de aparentar honorabilidad, y por último la falta de ética al engordar fondos que casi nunca se utilizan para el bien colectivo.201605y06_214746.jpg Por eso se me encadenan y amontonan las preguntas: ¿Estar en esos asuntos es ilegal de código penal o se queda en escándalo y espectáculo como acudir a un funeral borracho y con camisa hawaiana? Continuar leyendo «Pensar migrañas panameñas»

Publicado el

Predicadores del ruido

tamborrada1.JPGComo en la vieja canción Mis noches sin ti, tiemblo al pensar en los casi dos meses de ruido electoralista que se nos viene encima. Decía Einstein que si haces siempre lo mismo no esperes conseguir resultados distintos, y aquí parece que todo el mundo sigue machacando su yunque, porque no saben proponer otra cosa o tal vez con la esperanza de que se vuelva realidad el principio goebbeliano de que una mentira mil veces repetida se convierte en verdad. Ya estamos en precampaña, y es entre cansina y enloquecedora la lista de frases que una y otra vez venimos escuchando desde el 20-D. Continuar leyendo «Predicadores del ruido»

Publicado el

¿Quién quiso y no pudo y quien pudo y no quiso?

Esta legislatura breve y languideciente a la fuerza ya no admite más comentarios: se comenta por sí misma, y deja en evidencia la ineptitud de quienes se dicen representantes de la soberanía popular. Se supone que la política no es una profesión y que las personas que acceden a ella son elegidas por sus conciudadanos porque son idóneas para desempeñar una función necesaria para la colectividad. Pero resulta que no, que el sistema de partidos políticos, fortalecido adrede por la Constitución de1978, ha originado nuevos centros de poder, IMG_1037.jpgque se mantienen por el sistema de listas cerradas, y de esta manera se convierten en profesionales de la política. No están en un cargo circunstancialmente como un paréntesis de su vida para aportar su talento a la sociedad, sino que acaban olvidando cuál es su función y de dónde proviene su mandato. Continuar leyendo «¿Quién quiso y no pudo y quien pudo y no quiso?»