De konejen me risken len perren
No seré yo el que diga que acertó con la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales norteamericanas. Pensaba que era una manifestación más del fracaso de la política de toda la vida, que se muestra de distintas maneras más allá de los tradicionales conceptos de derecha e izquierda y que al final ganaría Hillary. A toro pasado, parece claro que era muy probable que ganase Trump, deberíamos haber aprendido la lección del Brexit. Pero aquí hay una diferencia inquietante. La propaganda a favor del Brexit estaba en todas partes, equiparada a la idea contraria; en este caso, la mayor parte de las cadenas de televisión americanas y periódicos más importantes no solo estaban contra Trump, es que lo ridiculizaban a todas horas, en portadas, en artículos y hasta en programas de entretenimiento. Quienes hablan de Trump como fenómeno mediático se equivocan, pues los medios no lo apoyaron. Pero ganó. Llaman populismo a todo lo que no está controlado por la política de siempre, y si es así, me temo que vamos a tener muchos ejemplos.