Mary Sánchez está ahora mismo realizando una serie de actuaciones con las que cierra una carrera de más de seis décadas de presencia en los escenarios. Ha cantado muchos géneros, desde las rancheras por Irma Vila con las que debutó (¡Qué lindo es Michoacán!) hasta los boleros, joropos y huapangos que trajo de América, sin olvidar sus incursiones en la canción ligera e incluso la revista, en una especie de representaciones cantadas que antaño se hacían en Las Palmas y que llamaban «Estampas». Tampoco es desdeñable su aportación al folclore puro y reglado de las isas, las seguidillas, las folías o las malagueñas.
Pero, con ser importante todo este largo, exitoso y duro recorrido, la gran importancia ya histórica de Mary Sánchez consiste en pertenecer a un escaso grupo de creadores que pusieron la primera piedra de lo que hoy llamamos «música de raíz», y que en los años 50 del siglo XX llamaban «canciones canarias». Junto a ella, hay dos pilares de aquel movimiento: Néstor Álamo en Gran Canaria y los Huaracheros en Tenerife. Nacía un tipo de canción que hablaba del paisaje, las costumbres, el mar, lo festivo, el trabajo, la emigración y, cómo no, el amor y el dolor.
Nació Mary Sánchez el mismo año en el que se cantó por primera vez en público Sombra del Nublo la ya mítica composición de Néstor Álamo, en la voz de Paquita Sofía, dentro del espectáculo denominado «Fiesta Típica», que se realizó en el Teatro Pérez Galdós en las navidades de 1934, con Néstor Martín-Fernández de la Torre y la Escuela Luján Pérez en la escenografía y el vestuario. Y es en ese mismo escenario en el que Mary Sánchez estrenaría tres lustros después una docena larga de canciones compuestas por Néstor Álamo y que hoy forman parte de nuestro imaginario popular. También en ese espacio tan unido a nuestra ciudad, esta noche Mary Sánchez volverá a cantar aquellas canciones que iniciaron un camino que llega hasta hoy y se proyecta hacia el futuro en muchas voces y estilos, pero que no habría sido posible sin aquellos pioneros, entre los que sin duda Mary es piedra angular.
(Con Libertad Lamarque, Alfredo Kraus, Pepe Luján y Néstor Álamo)
Mary Sánchez no es una cantante folclórica, a secas; es una de las voces que prendieron la mecha de un tipo de canción en Canarias, que ha evolucionado en muchas direcciones, pero que tiene su origen en aquellos años ya míticos. La cantante es el referente de una época que llega hasta la actualidad. Gustará más o menos, pero lo que nadie puede negarle (y tristemente muchos que olvidan u ocultan la historia se lo niegan) es que sin ella la música de raíz en Canarias sería muy distinta, o simplemente no sería.