El nuevo lenguaje (II)
Está claro que entre los SMS y los responsables públicos, nuestra lengua se está convirtiendo en un jardín en el que lo políticamente correcto se estampa contra la norma una y otra vez. Pero más que eso, lo que me ha llamado la atención es el significado que se da a las palabras, cada uno a su aire. Ya no sé qué hacer con mi diccionario. Transcribo literalmente: