Lápiz corto-memoria larga

La informática nos gobierna y determina parte de nuestras vidas. Cuando tenemos un problema con el ordenador, se rompe el ritmo, nos encontramos incomunicados y ya roza la catástrofe si un virus nos inhabilita la máquina hasta el punto de hacernos perder la libreta de direcciones de nuestros contactos por correo electrónico.
Teclado-de-ordenador-28283[1].jpgDecía Unamuno que vale más tener un lápiz corto que una memoria larga, y eso sigue valiendo hoy, porque tenemos las largas memorias de los ordenadores y los móviles, pero si se nos estropea el aparatito no podemos siquiera llamar a nuestro mejor amigo. En la memoria de los móviles están los números que hemos ido introduciendo y que luego usamos sólo con la llamada del nombre, pero no nos sabemos las nueve cifras del teléfono de nuestros hijos o de las personas más cercanas.
De modo que, cuando se nos rompe el móvil o el ordenador nos quedamos fuera de circulación. Por eso es buena la medida de tener una libreta manual con esos números y esas direcciones de e-mail, usando el lápiz corto de Unamuno. Si es así, cuando se nos estropee el móvil o el ordenador siempre podremos recurrir a la memoria física de puño y letra. Hay que hacerlo, porque tarde o temprano las máquinas se paran.

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