Me ha extrañado que los italianos se hayan escandalizado al ver en los medios la foto de los cadáveres de dos niñas gitana ahogadas en una playa de Nápoles, mientras los bañistas seguían a lo suyo, como si nada hubiese pasado.
Esto nos ha pasado aquí, con la llegada de las pateras y los cayucos, que a veces, por desgracia, también traen cadáveres a bordo. Y lo que me extraña de esta foto en Italia es que se haya escandalizado la opinión pública, y yo también me escandalizo, por el poco valor que damos a las vidas humanas que no forman parte de lo que entendemos como nuestro ámbito. Esa extrañeza es positiva, porque eso quiere decir que todavía queda un poco de decencia en el corazón humano.
Los italianos están viviendo un bombardeo berlusconiano de xenofobia, y tal vez esta foto les haga mirar a su interior y darse cuenta de que el nuevo «Duce» es un peligro para la libertad y para la dignidad. El bien más preciado es la vida, porque es única, y por ello toda muerte debe llevar consigo el mayor de los respetos. Y es que muchos olvidan que los que no son de nuestra etnia también son seres humanos. Lo que nunca tengo claro es de qué etnia somos nosotros. Yo creo que solo hay una: La Humanidad.
Un comentario en “La foto terrible”
Deja un comentario
El contenido de los comentarios a los blogs también es responsabilidad de la persona que los envía. Por todo ello, no podemos garantizar de ninguna manera la exactitud o verosimilitud de los mensajes enviados.
En los comentarios a los blogs no se permite el envío de mensajes de contenido sexista, racista, o que impliquen cualquier otro tipo de discriminación. Tampoco se permitirán mensajes difamatorios, ofensivos, ya sea en palabra o forma, que afecten a la vida privada de otras personas, que supongan amenazas, o cuyos contenidos impliquen la violación de cualquier ley española. Esto incluye los mensajes con contenidos protegidos por derechos de autor, a no ser que la persona que envía el mensaje sea la propietaria de dichos derechos.
Yo también soy de tu opinión, pero difiero en un matiz, a mi juicio terrible: No es Berlusconi quien produce italianos fascistas; son los italianos fascistas quienes han producido a Berlusconi. De modo que no es éste el culpable, sino quienes lo han puesto ahí. De ello se deduce una esperanza final: si lo han puesto, lo podrán quitar, eso nos sigue diferenciando de las dictaduras.
Saludos.