Es el macronutriente más estudiado en la comunidad científica, el más debatido dentro del personal sanitario y el más comentado en los gimnasios. Hablamos de la proteína.
La proteína es el macronutriente al que más funciones y de gran importancia se le pueden atribuir, dentro de las cuales quiero destacar su función plástica y contráctil, ya que la proteína es la única responsable de formar nuevos tejidos y de la contracción muscular por medio de proteínas contráctiles.
Destaco esas dos funciones debido a que son las que más interesan a los habituales consumidores de proteína en gimnasios, y me dirigo a ellos porque resulta que ahora tienen que estar de enhorabuena, ya que estamos ante un nuevo producto increíblemente proteínico y de una calidad nutricional impropia de muchas de las proteínas convencionales, la harina de grillo.
La harina de grillo no sólo contiene un 70 % de proteína por 100 gramos de producto, sino que además, la poca grasa que contiene está considerada como grasa saludable, además y no menos importante, contiene fibra, algo de lo que carecen el resto de proteínas animales.
La harina de grillo es tan sólo uno más de los muchos productos entomófagos que están por llegar, pero resulta increíble que a partir de un producto entero, como son los grillos, con un simple proceso (molienda), se consiga un producto tan rico en proteínas propio de un aislado proteico el cual está considerado un producto ultraprocesado que, en comparación a la harina, deja mucho que desear.
Por lo tanto y teniendo en cuenta las características nutricionales de este producto, podemos afirmar que estamos ante un posible competidor de los muchos aislados proteicos ofertados en el sector dietético ya que se trata de una opción mucho más saludable.
Quién sabe si en unos meses veremos a personalidades como Arnold Shwarzenegger entrenando en compañía de su shaker con harina de grillo lista para hacer crecer sus músculos.
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