Discapacitados físicos
Siempre se ha hablado de las barreras arquitectónicas que existen para los minusválidos físicos, y uno está a favor de que se supriman esos obstáculos. Pero el caso es que estamos a favor pero nada hacemos por hacer más fácil la vida a quienes tienen problemas para desplazarse. Tiene uno que vivir el problema en propia carne, o muy cerca, para darse cuenta de lo realmente insolidarios que somos con los minusválidos. Basta que alguien se tuerza un tobillo y tenga que andar una corta temporada con muletas para apreciar en toda su monstruosa dimensión la realidad de nuestras ciudades, construidas de espaldas a las minusvalías. Hay escaleras por todas partes, y cuando hacen una rampa le suelen poner tanto desnivel que es imposible que por ella circule una silla de ruedas, como no la suba Hércules o se pretenda bajar en plan Ferrari. Lo de las barreras arquitectónicas es una teoría que debe hacerse realidad cuanto antes.