El cielo se nos viene encima
Pues parece que un día de estos va caer sobre nuestro planeta un satélite ya inservible que ha perdido su órbita y es atraído por la gravedad. Yo había oído decir siempre que los cuerpos se desintegran por rozamiento al atravesar la atmósfera, pero por lo visto este satélite es de muy buen material y lo que le ocurrirá es que se partirá en 26 piezas. Algunos serán mayores y otros más pequeños, pero digo yo que si los técnicos de la NASA son capaces de averiguar con complejas ecuaciones el número de trozos en los que el satélite se va dividir, con un par de ecuaciones más nos podrían decir el lugar (o los lugares, porque son 26) de los impactos. Dicen que el riesgo de que dañe a alguien es de 1/3.200, lo que no es un consuelo, porque acertar la primitiva es una posibilidad entre muchos millones y le ha tocado a mucha gente. Es que ni acotan la zona porque hablan de Canadá a Tierra de Fuego (toda América), parte de Africa, Europa y nombran hasta Nueva Zelanda. O sea, en cualquier parte menos en La Antártida (si fuese una película americana seguro que amenazaba Nueva York, y Bruce Willis tendría que salir a su encuentro para destruirlo en pleno vuelo). Un listillo de la Nasa dice que hay 3 posibilidades de cuatro de que caiga en el mar; para eso no hay que ser ingeniero espacial, la superficie de La Tierra está cubierta de agua en sus 3/4 partes. Como se va a trocear como las bombas de racimo, se repartirá por mucha superficie, dependiendo siempre de a qué altura se fragmente (habrá que llamar también a Stallone, Harrison Ford, Daniel Craig y hasta el guaperas de Brad Pitt va a tener que pringar y traerse a su esposa Lara Croft). Y no crean que basta con estar bajo techo, porque, con la aceleración de la gravedad, un trozo de satélite tendrá una potencia tremenda al chocar contra el suelo, y esos 50 kilos de media que pesa cada uno se multiplicará. No creo que haya muchas estructuras terrestres que aguanten un impacto así. Queremos saber del espacio exterior, queremos comunicarnos vía satélite, queremos el progreso, pero ya hay tanta basura espacial orbitándonos que cualquier día se nos va a venir el cielo encima.