Quieren que volvamos a la Edad Media
Se tambalea el cambio que se inició en el siglo XIX con las sufragistas y la lucha por la igualdad de de todas las opciones sexuales; ha sido una avance tremendo, bendecido por la Declaración Universal de los Derechos Humanos y remachado por actuaciones como la de la OMS cuando decretó que la homosexualidad NO es una enfermedad. En buena parte del planeta esto no sirve, porque solo hay que ver el trato a la mujer o los homosexuales. Creíamos que Europa ya estaba ganada, pero vienen otra vez los reaccionarios de siempre y se apoyan en religiones, costumbres y casi diría que en la maldad para volver a los tiempos oscuros. Lo de Rusia es impresentable, y más impresentable aun la nula reacción de la Europa «de las libertades» ante tal atropello. Espacio inmenso en todos los medios al duelo Messi-Ronaldo, a la llegada de Neymar o el culebrón Bale. El problema ahora es si Casillas es o no titular, el pobre. Mientras tanto, cercenan derechos y libertades. En España ya han empezado con las mujeres y no me extrañaría que pronto tocaran los avances alcanzados en la igualdad de las personas que se relacionan con su mismo sexo. Hablan de tradición y esa es una palabra que me da pánico, porque no todas las tradiciones deben ser conservadas; es más, muchas deberían ser abolidas hasta de la memoria. La tortilla de carnaval es una tradición conservable, pero no lo es lanzar cabras desde los campanarios, martirizar toros o perseguir homosexuales; y así otras muchas. De manera que, la cosa ahora anda por Rusia (también por Francia, no crean) y aquí estamos prestos a imitar lo negativo. Hay que estar alerta.