¿Más de lo mismo?
Da la impresión de que las elecciones no han servido para nada, porque empieza a ocurrir lo mismo que antes, pero con los papeles cambiados. De repente el Gobierno toma unas medidas que pasan por encima de su programa electoral y la oposición se mesa los cabellos; lo mismo que antes, pero ahora es de suponer que si la culpa de todo la tenía Zapatero ahora va a tenerla Rajoy. ¿O es que va a seguir durante tiempo indefinido la cantinela de que todo lo malo que haya en lo económico es obra del anterior gobierno? Y la nueva Vicepresidenta no se esconde para decir que estas medidas son «el principio del principio», un nuevo concepto que suena a amenaza o a advertencia severa. Viendo la poca incidencia que las políticas gubernamentales tienen en la salida de la crisis, me pregunto si realmente el control lo tienen los gobiernos, o son meros figurantes en una representación de la que pocos conocen el texto. Por lo pronto, hay más leña a las clases medias, y cuando se habla de reforma laboral siempre sale en primer lugar lo de la flexibilidad. Es como si lo que se planteara no fuese aumentar el número de trabajadores sino el de desempleados. En cuanto a los impuestos, ya se dice que los trabajadores van a pagar los dos tercios de la factura. No es justo, pero no es ninguna sorpresa, es lo que hacen los partidos conservadores. A ver qué van a argumentar quienes pensaban que todo iba a cambiar como por arte de magia solo con que Zapatero se fuese a su casa.