Nuestra sociedad ha llegado a un punto de zafiedad alarmante. Y tengo que acusar claramente a las personas con responsabilidad y a los medios, especialmente la televisión, que permiten que estos comportamientos, actos y actitudes sea ya casi la normalidad. Luego nos quejamos de que un niño de nueve años ponga patas arriba a todo un colegio, o que unos padres pidan ayuda pública porque incluso tienen miedo a sus hijos, por no volver sobre el calvario que sufre cada día el profesorado con todo tipo de violencia.
¿Qué se puede esperar de un país en el que a todas horas en la televisión la gente se insulta, se amenaza e incluso llega a las manos, sin que nadie ponga coto porque tiene miedo a que le acusen de coartar la libertad de expresión? Luego se rasgan las vestiduras porque, en la televisión pública, un rapero se lleve las manos a los genitales, si aplaudían cuando lo hacía Michael Jackson. Si una persona insulta, veja o amenaza a otra en un plató no está ejerciendo la libertad de expresión, que como toda libertad, tiene el límite exacto de donde empieza la libertad del otro. Yo no digo que volvamos a los tiempos remilgados en los que en la radio y en la televisión estaban prohibidas palabras tan normales como bragas (y hablo de tiempos democráticos), pero es que lo de ahora es una escuela de educación permanente en la violencia, el machismo y la intolerancia (¿Les suena de algo la frase «es mi verdad»?)
La agresividad ya está en los personajes públicos, que se burlan, ridiculizan y hasta insultan incluso a los de su partido a poco que crean que han cerrado los micrófonos. ¡Si pierde los nervios un ex-presidente y hasta el mismísimo Rey de España, haciendo «peinetas» a quienes los abuchean! De acuerdo en que no es de recibo (es ya un círculo vicioso, más de lo mismo) que se insulte a gritos a personajes públicos, pero se espera de ellos el temple suficiente para capear el temporal. Hasta Zapatero, «Míster Talante», está empezando cabrearse en público, ¡quién lo iba a decir! Corren malos tiempos para los Hare-Krisna.
Pues los Hare Hare Krisnas no dejaban de ser grupos tranquilos, una secta eso si, yo los recuerdo cantando por las Ramblas de Barcelona todos de naranja , una nota de color en invierno repartian pastelitos de colores creo que contenían algo para que volaras más pero nunca probé ninguno, malos tiempos no sé si podrán ahora saltar y cantar si les sale los boixos esos negros.
Todo el mundo anda cabreado, pero es que todo está muy caro, y eso cabrea, por cierto Camps solo ha ahorrado 900 Euros, es que se lo gasta todo ese hombre en trajes, si fuera hae iria con una tela narnja y tan apañado.
Si hay algo claro en la actualidad politica estan llevando
todo al caos apocalictico, lo que tiene una cosa
de bueno es que la gente dejara de creer en la
politica y creera un poco más en El Dios de la Creaccion
Jesucristo Krisna ….
Padre nuestro Hare krisna