Publicado el

DIARIO DE CUARENTENA. Jornada 55: La casa tigre. (08/05/2020).

 

Nunca me olvido de las personas que ya no están. Cada día se me estremece el alma por los fallecidos debido a la pandemia, y cuando usan los muertos como números estadísticos. Ya sé que de alguna manera hay que ir midiendo cada parámetro, pero aunque así sea da escalofríos pensar en esas miles de vidas segadas. También me da mucha rabia la ligereza con la que algunos tratan este asunto como si fuera un equilibrio entre vidas humanas y marcadores económicos. Las personas fallecidas merecen un enorme respeto, y también los familiares, que no han podido siquiera hacer una mínima despedida. Los muertos se cuentan, pero no son números, son personas.

Ya no sé qué pensar de la calle. Por una parte veo a muchos personas que salen a la hora estipulada a dar sus paseos, con mascarilla y guardando la distancia física. Luego veo que entre la mayoría de personas responsables, hay quienes se paran, hablan desde muy cerca y a veces sin mascarilla. La idea es que no hay que dar oportunidades al virus, y basta que alguien meta la pata para que esto no pare. Entiendo el riesgo que corren quienes tienen que trabajar y desplazarse de un lugar a otro, o estar por obligación en un recinto cerrado que atiende al público, pero lo que no entiendo es que se corran riesgos innecesarios, porque se está jugando con la salud de todos. Así que esa gente que piensa que todo es Jauja debería reflexionar y ser más solidaria.

Aunque ayer amaneció brumoso en la ciudad, la tarde quedó despejada y luminosa. Los vecinos salimos cada tarde a compartir ese espacio común entre dos calles. Los operarios de la pintura siguen trabajando y creo que pronto darán la pintada definitiva. Ahora mismo, el edificio parece la piel extendida de un animal con manchas, con rayas aquí y allá, acaso un tigre, y va a recuperar el esplendor que siempre tuvo la casa. Sofía pidió que mi compañera le enseñara un muñeco que, de lejos, tiene un aire a Diego, de tal manera que lo ha rebautizado con el nombre de su hermano. Ella no se queda atrás y nos ha enseñado una muñeca que llama Eva, seguramente porque se olvidó de la ropa. Siempre hay algo nuevo, la inocencia es creativa. Buen viernes.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *



El contenido de los comentarios a los blogs también es responsabilidad de la persona que los envía. Por todo ello, no podemos garantizar de ninguna manera la exactitud o verosimilitud de los mensajes enviados.

En los comentarios a los blogs no se permite el envío de mensajes de contenido sexista, racista, o que impliquen cualquier otro tipo de discriminación. Tampoco se permitirán mensajes difamatorios, ofensivos, ya sea en palabra o forma, que afecten a la vida privada de otras personas, que supongan amenazas, o cuyos contenidos impliquen la violación de cualquier ley española. Esto incluye los mensajes con contenidos protegidos por derechos de autor, a no ser que la persona que envía el mensaje sea la propietaria de dichos derechos.