La RAE define la palabra resultado como efecto y consecuencia de un hecho. Después de las elecciones autonómicas catalanas, me atrevo a decir que no existe tal resultado, porque no resuelve el problema al carecer de efecto y consecuencia. Un plebiscito era una ley romana que proponía el Tribuno de la Plebe y contaba con el apoyo mayoriario de esta. En ese sentido, tampoco se ha producido un plebiscito, porque Artur Mas hizo de tribuno con su propuesta, pero no se cumplió la segunda parte, el apoyo mayoritario. Ah sí, en diputados, pero no en votos, y esa es una de las trampas que hace a la democracia el sistema D’Hont de contar votos y escaños. O sí se cumplió, porque ahora resulta que unos suman a estos con aquellos y la mitad de no sé cuáles, y otros restan los que solo quieren que caliente pero que no queme. Las empresas del sector van a forrarse vendiendo calculadoras. También hay quien dice que para que un plebiscito sea válido ha de hacerse una pregunta concreta y votar sí o no. Y sigue la función: la derecha española dice que el independentismo ha fracasado, los independentistas que están legitimados para proceder y que es legal desobedecer leyes, otros proclaman que hay que convocar nuevas elecciones como las de antes, con programas, visitas a los mercados y besos a los niños. Digo yo que ni se lleven las urnas, que las dejen instaladas permanentemente. ¿Y lo de gobernar? Bueno, pues que ya si eso… Se abre una gran incógnita porque encima Messi va a estar de baja dos meses.
El contenido de los comentarios a los blogs también es responsabilidad de la persona que los envía. Por todo ello, no podemos garantizar de ninguna manera la exactitud o verosimilitud de los mensajes enviados.
En los comentarios a los blogs no se permite el envío de mensajes de contenido sexista, racista, o que impliquen cualquier otro tipo de discriminación. Tampoco se permitirán mensajes difamatorios, ofensivos, ya sea en palabra o forma, que afecten a la vida privada de otras personas, que supongan amenazas, o cuyos contenidos impliquen la violación de cualquier ley española. Esto incluye los mensajes con contenidos protegidos por derechos de autor, a no ser que la persona que envía el mensaje sea la propietaria de dichos derechos.