Dale un gallo a Esculapio

Vivimos tiempos en los que todo pierde sentido. Ya no sirve la lógica tradicional, la que venimos utilizando en los últimos 2.500 años, desde la Grecia Clásica, y el doble si nos remontamos a los Sumerios. Una caja de ahorros fue rescatada en 2010 con más de 8.000 millones de dinero público, y ahora se vende con nuevo nombre a un grupo financiero privado por 1.000 millones; pagamos entre todos la diferencia, y nadie responde ni política ni judicialmente. Nos vienen a decir más o menos que son gajes del oficio. Carlos Floriano, preboste del PP, ha dicho sin pestañear que estamos saliendo de la crisis gracias al esfuerzo de los que más tienen. Según mi lógica de siempre, las cifras dicen que los pobres son legión, que las clases medias casi han desaparecido y que las grandes fortuna ganan a veces hasta un 7% más que en ejercicios anteriores.zzzgalloesc.JPG Ya Sócrates no me sirve, debo armar mal mi pensamiento o directamente esta gente miente. Por otra parte, nos dicen que todo mejora, que ya acabó el rescate europeo de la banca española, que el FMI anuncia una recuperación de la economía y la consecuencia es que el Presidente de la Comisión Europea pide a España más recortes. He tirado los libros de Sócrates a la basura (anda, pero si no escribió ninguno), lo cual me viene a decir que son palabras volanderas las de todos: reforma del Senado, nuevos planes de financiación de las autonomías, el sainete catalán, y mientras tanto familias enteras cosidas por el hambre y ateridas por el frío; pero a ellos les da igual, piensan con la nueva lógica, utilizando voceros en sus medios de comunicación, haciéndonos ver que los guisantes son pequeños pero sabrosos, que la judías verdes son muy saludables y que el pimiento tiene vitamina A; no, señores, háblenme del filete, que casi no se ve, y de los grandes chuletones que ustedes consumen por encima de nuestras posibilidades. A estas alturas, empiezan a no interesarme todas esas reformas estructurales y legislativas anunciadas y que nunca se hacen. Incluso si se hicieran, estaríamos hablando de las verduritas de la guarnición, porque en España hay mucha gente que no come, que vive en la calle y no tiene cobertura social. Sócrates no escribió ningún libro, pero tenía tanto sentido de la justicia que, antes de morir, tuvo en cuenta que había que devolverle un gallo a Esculapio, que pudo ser un hecho real o una gran metáfora (en ese caso más me gusta). Así que, no nos hagan luz de gas, ya no cuela; déjense de machangadas de cuello y corbata, dejen de mentir y dejen de robar.
***
(Hablar de estas cosas empieza a ser peligroso, porque ya anda de por medio hasta la mismísima Santa Teresa en boca de un ministro, y actuar hace tiempo que lo es, basta mencionar lo ocurrido con Garzón o el proceso al juez Silva).

Un comentario en “Dale un gallo a Esculapio”

  1. Pues………….Siempre nos quedará Paris.
    (Eso lo dicen porque tienen miedo a manifestaciones como las de Burgos) que salgamos a la Calle y nos metamos como en La Laguna con WErTER…..ese que dice que no sabe lo que son recortes…..ya no me creo nada, casi siempre los lunes nos dicen que crecemos un 0¨6 y luego va Argentina, se desploma y nos vamos con ella….eso el Martes….

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