Un trabajador jubilado baqueteado en las luchas sindicales me comentaba hace unos días que nunca podría entender por qué un obrero vota a la derecha, y mucho menos a la ultraderecha. Pero es así, porque la inmensa mayoría de los votantes son personas trabajadoras, ya que el dinero y el poder es de unos pocos. Si a la derecha le votaran sólo los ricos y poderosos sería una fuerza testimonial en cualquier parlamento.
Y esto ha vuelto a suceder en Estados Unidos. Muchos pobres, inmigrantes, mujeres, hispanos y negros han tenido que votar al Tea Party para que hayan cosechado tal éxito electoral, porque ellos por sí solos son cuatro gatos. Los cuatro que con el voto del trabajador quieren desmantelar el Estado de Bienestar en esta Europa nuestra. Incomprensible que alguien le dé al otro la soga con que lo han de ahorcar. Pero sucede una y otra vez, en Gran Bretaña con Cameron, en Francia con Sarkozy, y ahora en plan aún más reaccionario en Estados Unidos. Ya sucedió -y este es un caso muy extremo- en las históricas elecciones alemanas de 1933 que llevaron a Hitler al poder. Y me pregunto quiénes serán los que darán la cara del Tea Party español, porque les aseguro que va a aparecer antes de las elecciones generales de 2012. ¿Mario Conde?¿Esperanza Aguirre? ¿Un testaferro de los medios de comunicación afines? ¿El mismísimo Aznar montado en un caballo blanco?
3 opiniones en “¿Se nos echa encima el Tea Party?”
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Habría que recordar aquí aquella estrategia de Clinton en el 92, ya sabes: The economy, stupid!
Lo del caballo blanco con Aznar estuvo bueno, me reí un rato.
(Ya leí el Pleamar, ya hablaremos, que algunos razonamientos no los comparto)
Y por cierto, ¡rediós!, el amigo Juancho, se despachó a gusto. «Chamán de las letras canarias…» Esú esú…
Está claro que no todos los trabajadores tienen conciencia social y de trabajador. No nos engañemos ¿nosotros no conocemos a amigos y familiares, trabajadores, votantes de derecha? Yo sí, desde siempre. De lo que se trata es de conservar las pocas cosas que la vida nos ha brindado (a algunos, porque a mí sólo me queda este teclado y quizás el módem un mes más y un par de tomates y lechugas en la neverita). Esas cosas que se quieren conservar, normalmente se asocian como un poder de la derecha, como un asunto que sólo ellos van a defender, o van a hacerlo mejor que los de izquierda. Y otra cosa, quizás más importante: el factor miedo. Esa es un arma que usan los de derecha con gran habilidad. Miedo a perder lo de uno, miedo al extranjero, miedo al moro, al negro, al vecino, al rojo (aunque en esto no se diferencia de los de izquierda: miedo al facha). Creo que estamos muy lejos de presenciar un verdadero y justo estado.