A vueltas con el tiempo
En estos días andamos liados con el reloj. Ayer, porque sonaba La Hora del Planeta y hubo apagones en todo el mundo. La pregunta que la gente se hacía es si era a la misma hora simultánea en todo el mundo, porque entonces en la mitad sería de día. Supongo que se irían adaptando a los husos horarios, y nosotros nos hemos tenido que adscribir al de La Península. O no.
Para colmo, esta madrugada se ha adelantado una hora el reloj, y se ha implantado el horario de verano. Hay que madrugar más y los primeros días está uno como una cabra harta de papeles, porque tampoco se duerme cuando se va una hora antes a la cama. Y es que esto de medir el tiempo es una tarea tan persistente como inútil.