El tiempo inexorable
El actor George Clooney ha declarado que le gusta envejecer, y como explicación ha dicho que está clara la elección, porque la alternativa es morir. Esta reflexión, hecha seguramente en plan coña, en el fondo encierra una verdad incontestable y que a menudo no tenemos en cuenta. El tiempo ha traído de cabeza al ser humano desde que tiene la facultad de pensar, y es una magnitud que no cesa pase lo que pase, inexorable.
Me contaban hace unos meses que una niña de Educación Infantil le decía a otra en un diálogo de aula que cada día que pasa es uno menos para falta para morirse. Es curioso cómo hablar de estas cosas pone nerviosa a mucha gente, pero el tiempo sigue su curso, pasando sobre cada uno de nosotros.
No crean que estoy depresivo, es que en Occidente siempre hemos tenido muy mala relación con la muerte. Hace un par de noches, llamó a la radio un hombre que decía ser budista y que decía saber que moriría en el 2033. Esto suena raro, pero dijo que cualquiera puede saberlo de sí mismo. Es una manera de verlo, pero estoy seguro de que pocos de por aquí, por no decir nadie, querrían saber la fecha de su muerte. Y a todas estas, yo estoy de acuerdo con George Clooney: lo mejor es seguir envejeciendo, porque la alternativa… Y hoy es una fiesta porque hemos visto amanecer otra vez.