Ernest Hemingway pone en el frontispicio de su novela Por quién doblan las campanas, un extracto de esta Meditación XVII del poeta inglés John Donne, maestro de la poesía británica contemporánea al Siglo de Oro español:
«Ningún hombre es una isla entera por sí mismo./ Cada hombre es una pieza del continente, una parte del todo./ Si el mar se lleva una porción de tierra, toda Europa queda disminuida,/ como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya propia./ Ninguna persona es una isla; la muerte de cualquiera me afecta,/ porque me encuentro unido a toda la humanidad;/ por eso, nunca preguntes por quién doblan las campanas; doblan por ti.»
![Puede ser una imagen de la catedral de Guadalajara](https://scontent-mad2-1.xx.fbcdn.net/v/t39.30808-6/415765779_10232622881782297_6260597918738549774_n.jpg?_nc_cat=108&ccb=1-7&_nc_sid=3635dc&_nc_ohc=zAyoO3QjbmIAX-JrGrb&_nc_ht=scontent-mad2-1.xx&oh=00_AfCUhhNMQTmJDPm7fVba415T3jSoaTTkHnSUgs0IZzSwaA&oe=65951DFE)
Se va 2023, y se ha llevado a personas que, de alguna forma, formaron parte de nuestra vida, de nuestra educación sentimental o de un momento crucial de nuestro camino. Hemos muerto un poco, porque, como dice John Donne en su poema, todos morimos como Humanidad cuando alguien se va, o se lo llevan, como ocurre ahora en Gaza, en Ucrania, en Sudán, en Irán, en… demasiados lugares. Nos han dejado figuras de todos los ámbitos, que, a favor o en contra, ocuparon una parte de nuestras vidas, y algunas han influido en ellas: Antonio Gala, Carlos Pumares, Jerónimo Saavedra, Concha Velasco, José María Carrascal (quien que me contó en directo y por RNE que el hombre había pisado La Luna por primera vez), Milan Kundera, Tina Turner, Botero… Pero quedamos nosotros, que somos a la vez la parte que se queda de los que se han ido.
2023 ha sido, además, cincuentenario de muertes de personajes importantes, que marcaron la respiración de muchos de nosotros, personas que murieron en 1973 pero que quedan en nuestros propósitos de cambiar el mundo: Salvador Allende, Víctor Jara, Abebe Bikila (el atleta más inalcanzable del siglo XX), Nino Bravo y los tres Pablos que tanto echase de menos el gran Alberto Cortez (Picasso, Neruda y Casals). Nada sería igual sin todas estas personas, y en 1973, hace 50 años, también falleció el gran escritor Canario de la Generación de 27 Claudio de La Torre, cuyo cincuentenario ha pasado sin pena ni gloria en su tierra. Pero sigue con nosotros en la fuerza de su Juan «El Chino».
También se nos fueron este años Alexis Ravelo, Ricardo Villares y Carlos Juma, como el año pasado se fueron Manolo Vieira, Jane Millares y Paco Juan Déniz. Pero están aquí, en la humanidad de nuestros corazones, en el eco cada vez más fuerte de estela. Hemos muerto todos, pero también entre todos mantenemos encendida su luz, porque somos Humanidad. No estemos tristes; duele, pero es la única manera de mantener a raya a la innombrable.
Que 2024 sea un tiempo de cordura, generosidad y amor a la vida. Nos hace mucha falta. Las campanas, igual que doblan, también repican por ti.
El contenido de los comentarios a los blogs también es responsabilidad de la persona que los envía. Por todo ello, no podemos garantizar de ninguna manera la exactitud o verosimilitud de los mensajes enviados.
En los comentarios a los blogs no se permite el envío de mensajes de contenido sexista, racista, o que impliquen cualquier otro tipo de discriminación. Tampoco se permitirán mensajes difamatorios, ofensivos, ya sea en palabra o forma, que afecten a la vida privada de otras personas, que supongan amenazas, o cuyos contenidos impliquen la violación de cualquier ley española. Esto incluye los mensajes con contenidos protegidos por derechos de autor, a no ser que la persona que envía el mensaje sea la propietaria de dichos derechos.