De lo que pudo haber sido y no fue

En Canarias, la crítica literaria funciona a salto de mata, por lo que no es raro que haya nombres sobredimensionados en y otros aplastados por el olvido y a veces la mala fe. La tarea es inmensa, pero por alguna parte hay que empezar. Hora es de dejar a un lado simpatías y antipatías, deudas y camarillas. La crítica seria puede acometerse desde distintos frentes, y uno de ellos debiera ser la universidad, desde la independencia, la libertad y la obligación moral y social. Urge sistematizar con rigor el siglo XX y ya empieza a haber bastante tajo en el XXI. Poner a cada cual en su sitio es siempre el mayor respeto que puede rendírsele a quien escribe, a su obra y a la cultura de la que proviene.

Foto0712ui.JPGTan grave como olvidar o silenciar es sobredimensionar lo que no procede. Porque sí, la literatura, como cualquier arte, también es cuestión de gustos, pero antes está el rigor, y ese no debe entender de preferencias. Lo que importa a la cultura es la obra; el escritor es simplemente un ciudadano. Las novelas y los poemas existen, pero no su valoración crítica. Hay autores y obras endebles que suenan mucho y otras escrituras valiosas siguen en el olvido. Soy juez y parte en esto, por lo tanto no me compete entrar en detalles, pero sí demandar de quienes tienen ese deber que desde la investigación certifiquen de una vez por todas el corpus literario de estas islas, que ya está escrito y en su mayor parte es como si no existiera porque se repite una y otra vez la misma cantinela.
La ausencia de estos trabajos lo mismo condenan al olvido páginas valiosas que permiten la perpetuación de fantasmas difíciles de espantar. Si en Canarias seguimos funcionando por mimetismo, capillas e influencias, la historia del futuro contará lo que hoy se haya dicho, a veces sin fundamentos serios. Por eso es importante que el que deba y tenga algo que decir lo diga, antes de que la lápida del tiempo -como el bolero- caiga sobre lo que pudo haber sido y no fue.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *



El contenido de los comentarios a los blogs también es responsabilidad de la persona que los envía. Por todo ello, no podemos garantizar de ninguna manera la exactitud o verosimilitud de los mensajes enviados.

En los comentarios a los blogs no se permite el envío de mensajes de contenido sexista, racista, o que impliquen cualquier otro tipo de discriminación. Tampoco se permitirán mensajes difamatorios, ofensivos, ya sea en palabra o forma, que afecten a la vida privada de otras personas, que supongan amenazas, o cuyos contenidos impliquen la violación de cualquier ley española. Esto incluye los mensajes con contenidos protegidos por derechos de autor, a no ser que la persona que envía el mensaje sea la propietaria de dichos derechos.