Publicado el

Hispanidad y tres piedras

El 12 de Octubre es un exponente más de que España no tiene remedio. Cierto es que esta fecha es el símbolo de uno momento histórico terrible, pero la historia es irreversible y nada podemos hacer hoy para cambiar los siglos del imperio. De eso parecen haberse dado cuenta en América, al menos en algunos sectores, que con inteligencia tratan de partir del punto en el que estamos porque otro no es posible, a no ser que podamos dominar el tiempo. Es en España donde no se aprecia el menor atisbo de que este enconamiento (otro más) vaya a ceder, y mientras unos insisten en lo más terrible de ese pasado común otro parecen DSCN4200eeee.JPGgozarse en su memoria, que hoy es una completa inutilidad retórica. El 12 de Octubre en principio no tendría que ser una gran fecha, en realidad habría que saltársela; pero ya que se empeñan en recordarla aquí y allá, habría que centrarla en las lenguas que habla esa inmensa comunidad, aunque sea el español-castellano-hispanoamericano la única común, lo que que no hace menores a las demás. Continuar leyendo «Hispanidad y tres piedras»

Publicado el

Justicia ejemplarizante

Se supone que hace más de 200 años que dejamos atrás una manera de administrar justicia en la que el acusado era culpable y tenía que demostrar su inocencia, cosa que casi nunca sucedía porque es muy difícil demostrar que no se ha hecho algo. Los cambios que empezaron en el siglo XVIII y se fueron extendiendo por todo Occidente durante el XIX y el XX establecen que todo el mundo es inocente y es el ministerio público el que tiene que aportar la carga de la prueba, esto es, acreditar con pruebas irrefutables que el acusado ha cometido el delito por el que se le juzga. imagenpicota.JPGDebe quedar claro para condenar, no vale que haya indicios, sospechas e incluso evidencias. Y en las sentencias se supone que se aplica una pena proporcional al delito cometido, siempre según las leyes en vigor. Continuar leyendo «Justicia ejemplarizante»

Publicado el

La RAE, la ortografía y «lo popular»

Con la ortografía, la RAE quiere quedar bien con todo el mundo y al final es criticada por todos. La verdad es que hace años que por mi cuenta y riesgo dejé de poner tildes sobre los pronombres demostrativos porque su función quedaba clara desde la sintaxis. Luego están las novedades que van goteando a través de la prensa, que uno supone que estarán muy justificadas por la seriedad de la institución y sus componentes. La gente es reacia a los cambios porque la ortografía se fija al automatismo de la escritura; romper esa inercia cuesta trabajo aaazIMG_1351.JPGy da un poco de rabia verse traicionado por la costumbre. Tengo que decir que, dentro del respeto que me merecen las personalidades que sientan su culamen (ellos han aceptado esta palabra forgeana) en los sillones de la RAE, que sus excelencias (tienen ese trato) andan últimamente queriendo apagar fuegos y tragando algunos sapos, una veces porque se impone la teoría de que el habla popular es tolerable tanto en sus hallazgos como en sus burradas, otras porque lo políticamente correcto se lo come todo, y otras más porque tratan de castellanizar (o españolizar) palabras de otras lenguas, y a veces no andan muy finos porque se han tragado bluyín como adaptación de los pantalones vaqueros, que Hispanoamérica suelen denominarse blue jeans. Continuar leyendo «La RAE, la ortografía y «lo popular»»