Coherencia y autoestima

Hay palabras que tienen muchos matices. Según el diccionario de la RAE, coherencia es «la actitud lógica y consecuente con una posición anterior». Se tiene por virtud mantenerse en sus ideas, pero sólo en los principios, porque las circunstancias pueden hacer cambiar la situación. Hay quien presume de coherente porque lleva 20, 40 año o toda la vida manteniendo la misma actitud ante algo, y eso puede ser muy admirable, pero a veces esa coherencia a marchamartillo está divorciada de la realidad y es como vivir en un mundo paralelo. z54321.JPGOtra cosa es ser consecuente, que es obrar en consecuencia según lo que se piensa o se dice. Ser consecuente sí que es admirable, porque las acciones cuadran perfectamente con el discurso, y a veces consecuencia y coherencia se confunden, cuando son dos conceptos muy distintos. Se puede ser coherente con unos principios ajustados a la realidad, porque a menudo suele suceder que mantenerse en una posición, por muy coherente que sea, puede resultar negativo incluso para la idea que se defiende. Por eso hay que tener cuidado con algunos conceptos, como los mencionados, o con la autoestima, que es un concepto en principio positivo, pero si se lleva a extremos estamos en la antesala del egoísmo más disparatado. De manera que, autestima y coherencia han de ser tomadas con cuidado para ser consecuentes en la forma debida.

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