La cresta de gallo sobrevive.
Ha pasado un año desde el gran incendio forestal de septiembre de 2017. Recordamos que el fuego, además de afectar a una zona de pinar, matorral bajo y su biodiversidad, también acabó con la vida de una persona en la zona de Cueva Grande.
Una de las preocupaciones iniciales era la rica biodiversidad y el impacto del incendio sobre aquellos rincones y parajes que conservaban algunos ejemplares relictuales de flora canaria. Así, el pasado mes, en una ruta de senderismo por la zona, descubrimos que la cresta de gallo sobrevive. En la foto un ejemplar de su bella flor.