EL SENDERISTA DEL SIGLO XXI
Con la entrada del nuevo milenio parece que se pusieron de acuerdo para comenzar a estudiar el fenómeno del turismo de naturaleza y de montaña. Este segmento del turismo, quizás más exigente y menos contemplativo, de aventuras controladas, de emociones y sensaciones, prefiere buscar nuevos itinerarios frente a los precocinados. En otras palabras, es una persona que quiere tener sus propias experiencias.
Por ahora son pocos los estudios existentes, en Canarias, aún insuficientes. Sin embargo, tanto a nivel nacional como internacional, en lo poco que hay, se apuntan curiosas tendencias como para tomárselo en serio.
De los estudios analizados y de algunos de los trabajos que se realizan en el entorno de la ULPGC, podemos ir avanzando que el turista de naturaleza y de senderismo ha evolucionado en los últimos años. Hemos dejado atrás los arquetipos, viejas etiquetas y patrones de consumo y comportamiento que, injustamente, se le asignaba al turismo de naturaleza.