Volver a la naturaleza, un libro de Richard Louv.

Este libro habla de un mal muy común para los que habitamos en Occidente: el síndrome del déficit de naturaleza. librofelicidad.jpg
Este trastorno quiere decir, ni más ni menos, que nos hemos alejado de nuestro «caldo primitivo», del lugar en el que nacimos (la Tierra, con mayúscula), tanto que estamos alienados; y aunque no lo creamos, aunque parezca que vivimos tan campantes por estas tierras de cemento y asfalto, hay algo en nosotros que, por dentro, tira hacia el verde, hacia los animales, hacia el fresco de la huerta, hacia el olor de la fruta recién cortada.
El libro enuncia, una tras otra, formas de volver a la Naturaleza, unas más radicales, otras menos, unas más al alcance de todos, otras de sentido común, pero todas inspiradoras.
¿Te has preguntado por qué estás cansado nada más levantarte?
¿Cuántas horas ves el sol al cabo del día?
¿Qué comes? ¿Sabes de dónde viene? ¿Es alimento?
¿Conoces la zona en la que vives? ¿Crees que sólo hay fauna y vegetación en los grandes paisajes naturales del mundo?
Hay muchas preguntas que hace este libro, las deja caer mientras Louv te cuenta su experiencia en primera persona y sus entrevistas con gente natural de lo más interesante
A veces no sabes lo que sientes, pero sabes que hay algo que no va bien. Yo he puesto palabras a muchas sensaciones que he vivido a lo largo de este último año y que no sabía cómo expresar.
• tienes conciencia de la Naturaleza y trabajas, aunque sea poco a poco, para estudiarla y conservarla. Aprenderás muchos modos interesantes de seguir adelante con tu tarea, y verás que en otros lugares del mundo hay iniciativas solidarias y comunitarias que salen adelante sin problemas.
• te apetece cambiar de vida, por mínima que sea tu apetencia, porque verás que es posible (aunque cierres el libro y todo siga igual, siempre hay esperanza).

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