Historias de Tokio: La portera, cuarta parte
«Lo que menos imaginaba era…»
Era…lo que ocurrió. Debo reconocer que soy una maniática de la limpieza. Bueno, o lo era en Japón. Y todo fue por un programa que estaba viendo en la tele. Al principio la veía sin entender ni una sola palabra pero lo cierto es que los programas eran muy divertidos, y poco a poco iba entendiendo más y más. Aquel día, un famoso presentador iba por la calle preguntándole a chicas japonesas guapísimas si les podía hacer una prueba: ellas se ruborizaban y se tapaban la boca (siempre lo hacen cuando se ríen) y, cómo no, aceptaban. La prueba consistía en colocar un pequeño microscopio de alta resolución en su nariz, en esa zona que se nos ensucia más, al lado de los agujeritos. ¡Dios! Ellas pegaron el mismo grito que yo. Las imágenes del microscopio eran terroríficas. Los monstruos de Alien estaban todos allí. Continuar leyendo «Historias de Tokio: La portera, cuarta parte»