Más allá del tópico de la jovialidad

Resulta difícil ponerse a escribir, en medio de esta vorágine informativa, de algo que no sean elecciones y sus correspondientes campañas. Como parece que este año la asistencia a las urnas va a ser notable, dejaré para otra entrada lo que me parece fundamental defender en estos momentos. Y me ocuparé de acontecimientos que marcan la vida diaria de mucha gente, fundamentalmente las mujeres. Pero incluso, si no voy a hablar de elecciones, hay una cosa clara cuando hablamos de nosotras y son los derechos. Y estamos ante unos comicios que nos llevará a la España de las derechas o la España de los derechos.
Asisto atónita, en medio de una semana frenética de viajes y trabajo, al salpafuera que se ha montado en este país por utilizar una palabra, una figura que se llama diálogo, mediador, relator o cómo quieran ustedes llamarlo.